Esos Jrandes Onvres de mi vida: Ronaldo

He estado agazapado esperando esta entrada para disfrutarlo doblemente.

Por una parte mi fiel admiración a Ronaldo, como persona sórdida y no como furbolista, aunque creo que en mi creció la llama cuando lo vi jugar por primera vez, mejor, como no jugaba. Mientras 10 mataos corrían tras el balón, el esperaba como un señor arriba junto al último defensa; si tenía que correr tras la pelota pues iba, pero correr para que se fuera por banda, pues como que no. Eso es ser listo, muy listo.

Ronaldo pertenece a esta jran estirpe de Onvres inviolables, que saben lo que quieren y lo prueban sin reparo, como en su día ya describí a Paquirrín; Profesión holgazán.

Y la otra parte, antes que se me olvide, como jran putero que es, sin miedo y dulzura poética, lo reconoce:

"Cuando vi que eran travestis retiré el equipo del campo"

Existen hombres, y onvres, luego viene galácticos como él que es capaz de casarse sin casarse. Gastarse millones en fiestas privadas y bodorrios, e invitar a todo un club de fúrbo, y que se hable más de la "esa" fiesta, su fiesta, que de los partidos en meses posteriores. Y que las mujeres del placer bajo dinero se froten las manos con sus visperas u onomásticas, no tiene precio.

Ronaldo nació pobre, como yo, pero yo sin el pobre. No como otros jrandes, el tuvo que sudar, en un principio para poder pagarse esas fiestas que ríete tu de las resacas de Ronalijiño (un pardillo que intenta aparentar ser El Jran Ronie, y no puede, le falta carácter y le sobra dientes, a igual que ese niñato calorro sacao de un barrio de Sevilla: puto makoi). Le gustaba cambiar de camisetas (y de equipo) como de mujeres, mostrando un regustillo por las rubias de parecido similar, pero que estos últimos años a mejorado: Como el vino, con la edad.

Omitiré que él y yo compartimos una difícil situación con ambas rodillas que nos sustentan en pie, porque sería desleal compararme: me falta kilos, un corte de lo más cool de pelo, y muchas "jrandes reproductoras" que probar. Soy un lechón al lado de tal verraco.

Y es que sus cortes de pelo son una revolución del estilismo moderno, una transgresión a lo preestablecido por la norma "bictoria vecan" y sus borregos confabuladores. Ronaldo se rapa el pelo y se pone un mocho como flequillo, todo Japón, Brasil y parte del extranjero se rinde a sus encantos sin tener que ponerse tetas de siliconas en la boca y menear por jollivus a tu marido. Que se deja perilla, pues hoygan, que yo también. Es ídolo de masas.

Podemos tacharle de atontao y demás simpleces que se nos venga en gana, ¿cómo se puede ir de putillas con pitos colgando teniendo lo que tiene?, pero nadie discute al Jran Flavio cuando va dejando niños a las modelos como meados por las esquinas los perros. Son jrandes onvres que por onvres, cometen fallos jrandes.

Pero toda mujer que se le relaciona sabe como es, el no oculta, es sincero; es fiestero putero, no consume ni bebe, solo trinca a lo que se mueve (incluido los que tienen manubrios). Algunas le consiguen sacar un "Si, quiero" (algo estúpido a estas alturas), otras una boda no boda de sus sueños, y otras aprovechan la oportunidad y se hacen actrís del santo y antiguo oficio del porno. A todas reparte un cacho de su ser, eso nadie lo duda.
...
Banda sonora: "We like to party" de Venga boys