Mañana

Hoy no sé que decirte. Qué puedo decirte para sacarte una sonrisa, para hacerte un poco más feliz. Hoy no sé que escribirte. Cómo decirte lo que siento y que no te asustes, o te quedes callada. Tu silencio, me lleva a mi silencio, y eso aún me da más miedo. No poder hablarte, quedarme sin palabras, no sentir nada.

Esta noche podré tocarte, mañana ya no. Esto va ser muy duro para los dos. Mañana es como no sentir nada.

Me gustaría que con un gesto decírtelo todo, para acabar con esta necesidad de escribírtelo todo. Pero entonces no podrías releer cada palabra, un gesto se puede olvidar, ser difícil de recordar. Pero lo que escribo, siempre lo podrás leer, y así mañana sentirme que no estoy callado a tu lado.

Hoy no se me está dando muy bien lo que quiero decirte, estoy confuso, entre difuso y confundido, por lo que es hoy y lo que es mañana. Pero quiero decírtelo aunque sea así de difícil para ti y para mi, así no sé si con este gesto que tanto repito, podré sacarte ese sonrisa y hacerte así un poco más feliz.

Y entonces lo seguiré intentando, por lo de hoy y por lo de mañana.

...

Bailar

Voy cogiendo el ritmo a esto.

Creo que es así como se te besa,
así como se tiene que amar.

Te temo por lo que me puedes hacer,
te temo porque contigo me siento desnudo,
y desnudo no puedo esconderme.

Creo que es así como se te quiere,
así como puedo quererte.

Voy cogiendo ya el paso,
y me está gustando

...

Ojos

• MIs ojos a veces te miran sucio, a veces te miran linda, 
• tengo tantos ojos con los que mirarte
• que me encantaría volver a verte
• para ver conque nuevos ojos te miro

...

Decirte todo

Qué te puedo decir cuando ya te lo han dicho todo antes que yo, ya tuviste caricias y muerdos, juegos entre risas, y se te nota en ti que algún otro mal amor: Ya sé que no soy el más alto, seguro que tampoco el más atento. Detrás de tus pasos voy, y pienso en lo que soy, y lo que nunca seré.

Qué puedo hacer. Si huyes, porque te veo correr. Y entonces te vuelvo a perder. Y no nos sobran los días, ni los momentos, ni los segundos para ser un poco más felices.

Qué puedo coger si seguro que una vez ya lo abarcaste todo. Tuviste tus poesías, y esas palabras bonitas, y alguien dijo antes lo que yo ahora repito.

Qué puedo darte: Todo, pero empezaré por un muerdo, o por un suave roce.

Sabes que me da igual lo que dejaste atrás, solo me importa lo que llevas hoy encima.

Porque con esta carta, la de ayer, y las mañana, con cada palabra que escriba te desnudaré. Y con cada beso, caricia, te vestiré con un nuevo traje hecho a tu medida, hecho a mi medida.
... A

Frío

Si quieres saber cómo me siento
a veces tendrás que escuchar
aquello que no te guste
lo otro que te hirió
... A ella

Vejez

Ojalá fuéramos niños, otra vez
así no saber nada, no saber que decir
y jugar creyendo que hacemos bien
y herir creyendo que no hay mayor dolor

Ojalá fuéramos niños
y así empezar otra vez
con los mismos amores, con los mismos errores
y encontrarnos años después, con estas edades.

...

Nuestra casa

Ves mis manos,
que un día te tocaron,
con estas es lo que levanté nuestra casa.

Ves ese pequeño disgusto, ves es mal gesto;
eso es lo que mantiene nuestro jardín.

Ves esos recuerdo colgados de las paredes,
yo no me acuerdo.

Ves cada habitación, como está lleno de vida
de nuestros hijos, y sus juguetes desordenados.

Y esos problemas que ese acumulan en la entrada,
de números, llamadas, y enfados.

Ves como hace tiempo perdí la bonita palabra,
y tú la sonrisa de juventud.

Ves estas manos,
que ahora te tocan,
con estas levantaré todas las casas que quieras.

Ves ahora lo que es la felicidad.




... A ella, nuevo.

Empezaremos a leer

Tendré algo que defina lo nuevo, para dejar atrás lo viejo. Llenar y llenar de palabras mal escritas, mal sonantes y otros insultos, para dejar hueco a lo que venga; vaciar la cabeza de pensamientos, llenarlos de sentimientos. Creo que me costará más que dejar escrita estas líneas para que las leas hoy.

Empezaré por lo fácil, hacerme una idea, desde un sentido, para luego crecer, y creer, que esto que empieza a andar ya solo, ¿es de verdad?, que puede superar más de un renglón escrito, y por qué no, convertirse en un buen libro.

Creer que cojo tu mano, pensar que ayer no estabas entre las mías, que estaba vacío de tantos besos mal logrados, tantas poesías vendidas. Creer que ahora te escribo pensando que lo vas a leer, me das miedo, me das pánico, de empezar otra vez, de poder hacer daño con una palabra, de poder darlo todo en una caricia.

Empezaré por lo fácil, sentir y dejar sentir, para luego creer, y crecer, que se empieza con una bonita palabra, cariño, para poder terminar con un buen final.



...Es a Ella, es a Ana